17 enero, 2010

Vacaciones, cuenta regresiva

No hay nada mas rico que el día que el ultimo día que trabajas pues saldrás de vacaciones, para mi ese día fue el viernes que termino, es increíble como mentalmente uno va contando cada hora que pasa y cada hora que se acercan las anheladas vacaciones.

El Inicio
Hora: 8:00.am
Situación: entrando una hora mas temprano pues el día anterior hubo apagón y salimos antes.
Nota mental: Entrando mas temprano, pero que importa es el ultimo día, es el ultimo día YEEEE (10 horas y contando).

La Reunión:
Hora: 9:00
Situación: reunión interminable con la jefa de área para hablar de... no tengo idea.
Nota mental: No te duermas, no te duermas no te duermas, DESPIERTAAAAA (9 horas y contando).

La Amenaza:
Hora:11:00
Situación: Hablando con el jefe
Jefe: Por favor necesito este proyecto hay que entregarlo hoy para que puedas salir de vacaciones.
Margee: Si no hay problema.
Nota mental: Lo termino aunque sea hasta las 10 de la noche pero yo me voy de vacaciones (7 horas y contando).

Horas mas tarde....

Terminando:
Hora: 18:00
Situación: Todos se están yendo y a mi aún me falta, eso no me inquieta pues no pienso aplazar mis vacaciones ni un día.
Nota mental: Falta poco, falta poco, no importa un par de horas más para la libertad!!!!

Entregando:
Hora: 20:00
Situación: Entregando el proyecto.
Jefe: Muy bien, bueno a partir de el lunes estás de vacaciones por favor deja tu email.. blah blah blah, y si hay algún problema con el proyecto te doy una llamadita.
Margee: Si por supuesto, cualquier cosa me llamas.
Nota mental: SI PUEDES UBICARMEEEEEEE

Y bien ESTOY DE VACACIONES por un periodo muy corto, pero que importa puedo descansar del trabajo, del stress, de las reuniones de indicadores, de las reuniones de productividad y de las mil reuniones que hacen, y sobretodo de la rutinaaaaaaaa de hacer una y otra y otra y otra vez lo MISMO.

3 comentarios:

Reivajss dijo...

do it!! :)

Jocho dijo...

que la tranca en la playa lo valga!

Dinorider d'Andoandor dijo...

no hay nada como alejarse de todo, la rutina y cobrar nuevos bríos